Características físicas:Como ya hemos dicho anteriormente, el cuerpo del gato silvestre es robusto y fuerte. Puede medir de 72 a 115 centímetros de largo y unos 35 a 40 de altura. Las extremidades son largas.
La cabeza del gato montés es cuadrada. Su cola es gruesa, peluda, anillada y termina en una larga punta negra.
Las orejas son pequeñas y los ojos de color ambarino o verdoso, de pupila vertical. Como todos los felinos goza de una extraordinaria vista y de un excelente oído. Tiene el pelo largo, suave y espeso.
Su color es, generalmente, gris amarillento, aunque existen muchas variaciones.
Comportamiento:El gato silvestre, aunque es de hábitos nocturnos, también se muestr activo durante el amanecer y atardecer. Son solitarios y mantienen un territorio que defienden de su propia especie con ferocidad.
Suelen estar en el suelo, aunque pueden trepar muy bien a los árboles.Su dieta consiste en una variedad de roedores como lauchas, ratones, jerbos, como también conejos, jabalís pequeños, pájaros, reptiles, ranas, peces, insectos y productos avícolas. No devora la presa en el lugar de su captura sino que la lleva a otro lugar. Es un depredador solitario.
Su forma de cazar es al acecho: espera a que la presa se ponga a su alcance, para después con un fuerte salto capturarla con las garras y un mordisco en la nuca si son presas pequeñas, o asfixiando a las más grandes.
En muchos otros casos se arrastra a ras de suelo acercándose sigilosamente consigue capturar a sus presas.
No hacen madrigueras, se suelen refugiar en lugares muy inaccesibles, como impenetrables marañas de vegetación, roquedos o árboles.